Octubre es el Mes de Concientización sobre la Violencia Doméstica (DVAM)

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es UNA DE NOSOTRAS.

1 de cada 3 mujeres en Rhode Island ha sufrido violencia doméstica.

El abuso doméstico ocurre en todas las ciudades y pueblos de nuestro estado. Las víctimas y los sobrevivientes son nuestros amigos y familiares, nuestros vecinos y nuestros compañeros de trabajo.

Esta campaña celebra las vidas de los sobrevivientes y sus personalidades únicas. Queremos mostrar a las víctimas y a los sobrevivientes haciendo las cosas que les encantan, ya sea tomar un café con amigos o animar a sus hijos en sus juegos deportivos.

Únase a la conversación: ¡todos podemos ayudar!

En Rhode Island, 1 de cada 3 mujeres (32,6 %)1 ha experimentado violencia doméstica en su vida. Para este punto de datos, la «violencia doméstica» incluye: violencia sexual por contacto, violencia física y/o acoso dentro de una relación íntima.

El 60 % de las mujeres víctimas reportan un impacto severo de la violencia, en comparación con alrededor del 30 % de los hombres que reportan un impacto. Los impactos incluyen experimentar el trastorno de estrés postraumático (PTSD), temer por la propia seguridad, sufrir lesiones, faltar al trabajo o a la escuela y necesitar servicios legales, atención médica o ayuda de un defensor.

Fuente
1. National Intimate Partner and Sexual Violence Survey (NISVS), Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC)

Las víctimas y defensores son conscientes de la prevalencia de la violencia doméstica, pero todavía no se conoce o se discute tan ampliamente en nuestras comunidades. Muchos de nosotros tenemos miedo de hablar sobre el abuso o sentimos que no es nuestro asunto mencionarlo. El abuso a menudo se sufre en silencio. Necesitamos romper el silencio y los sobrevivientes están hablando y compartiendo sus historias cada vez más.

A partir de los datos del informe estatal de arrestos, vemos que año tras año la violencia doméstica ocurre en cada ciudad en Rhode Island. Estos datos solo incluyen incidentes de abuso doméstico que se reportan a la policía. La violencia doméstica no se denuncia en gran medida debido a las muchas barreras que enfrentan las víctimas, incluyendo el temor por su seguridad, el estigma que rodea el abuso y la imposibilidad de acceder a los sistemas y servicios de apoyo.

Con tasas tan altas, lo más probable es que cada uno de nosotros conozca a alguien en su familia o de su círculo social, como una vecina o una compañera de trabajo, que haya sufrido violencia doméstica. Necesitamos escuchar a las víctimas y hacerles saber que les creemos y las apoyamos, y que es seguro hablar con nosotros sobre lo que están enfrentando. Cada uno de nosotros puede apoyar a quienes sufren maltratos mostrándonos atentos, preguntándoles cómo están y ofreciéndoles recursos.

En Rhode Island, 1 de cada 4 hombres (25,4 %)1 ha experimentado violencia doméstica en su vida. Para este punto de datos, la «violencia doméstica» incluye: violencia sexual por contacto, violencia física y/o acoso dentro de una relación íntima.

Es importante señalar que los impactos para las mujeres y los hombres que enfrentan abuso son diferentes. El 60 % de las mujeres víctimas reportan un impacto severo de la violencia, en comparación con alrededor del 30 % de los hombres que reportan un impacto. Los impactos incluyen experimentar el trastorno de estrés postraumático (PTSD), temer por la propia seguridad, sufrir lesiones, faltar al trabajo o a la escuela y necesitar servicios legales, atención médica o ayuda de un defensor.

Fuente
1. National Intimate Partner and Sexual Violence Survey (NISVS), Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC)

La mayoría de los datos a los que tenemos acceso están enmarcados en una distinción binaria de género (masculino/femenino). Reconocemos que el género es más complejo que la construcción binaria. Es importante que los datos sobre violencia doméstica se reúnan de manera que incluyan a todos los géneros y reflejen a las personas que se identifican fuera del constructo binario de género.

Las personas LGBTQ+ y de género no conforme experimentan abuso y formas interrelacionadas de violencia en porcentajes iguales o mayores que las personas heterosexuales cisgénero. Manifestamos que es esencial para nuestro trabajo de ponerle fin a la violencia que los datos basados en género se recopilen y se representen de manera precisa e inclusiva. Seguimos trabajando dentro de la RICADV, dentro de los sistemas y con socios a nivel local y nacional para abogar por sistemas de datos y enfoques que representen con precisión el género y la violencia de género.

Aunque el abuso doméstico puede ocurrirle a cualquier persona sin importar su raza, etnia, edad, género, orientación sexual o nivel socioeconómico, algunos grupos corren un mayor riesgo de sufrir violencia. Esto se debe en parte a que la distribución de los recursos que mantienen a las personas seguras y promueven nuestro bienestar no es equitativa. Los sistemas de opresión impulsan estas desigualdades y crean condiciones dañinas que aumentan el riesgo de violencia doméstica, como la pobreza y la falta de oportunidades educativas y económicas. Los sistemas de opresión incluyen el racismo, el sexismo y la transfobia. Los grupos más afectados por la violencia doméstica son también los más afectados por otras formas de violencia y opresión sistémica, incluyendo a personas Negras, Indígenas, y Gente de Color (BIPOC), mujeres, personas LGBTQ+, personas con discapacidades, inmigrantes y personas que están o han estado encarceladas.

Los datos1 de la Rhode Island’s 2019 Youth Risk Behavior Survey (YRBS) muestran las siguientes tasas de prevalencia para los estudiantes de escuelas secundarias públicas de Rhode Island que informaron violencia en el noviazgo o sexo forzado durante los últimos 12 meses, entre aquellos que han salido con alguien en el último año:

  • 4% entre estudiantes de escuelas secundarias públicas
  • 5% entre estudiantes lesbianas/gays/bisexuales (vs. 7,3% entre estudiantes heterosexuales)
  • 8% entre estudiantes de género no conforme (vs. 8,4% de estudiantes cuya expresión de género se alinea con su sexo)
  • 3% entre estudiantes que tienen una discapacidad (vs. 7,5% entre estudiantes sin discapacidades)

La mayoría de estas víctimas tenían entre 15 y 18 años.

1 El Departamento de Salud de Rhode Island le proporcionó a la RICADV los análisis de tabulación cruzada tras una solicitud.

Esta campaña de concientización se desarrolló en asociación con víctimas que compartieron sus diferentes experiencias e historias, algunas de las cuales se reflejan en las imágenes de la campaña. Sin embargo, la campaña no representa ni abarca todas las experiencias de las víctimas.

A menudo, es posible que no sepamos que alguien es una víctima. Las personas que sufren abuso pueden seguir activas en diferentes áreas de sus vidas, como colegas, amigos o padres. El hecho de que alguien esté sonriendo no significa que se sienta seguro en casa o que no esté enfrentando abuso.

Por ejemplo, hemos escuchado de víctimas que su lugar de trabajo era el único lugar donde se sentían felices porque podían ser ellos mismos, por lo que sonreían con frecuencia en el trabajo. Otros han comentado que sentían que tenían que fingir una sonrisa porque nadie sabía por lo que estaban pasando y no se sentían cómodos o seguros pidiendo ayuda. Algunas víctimas han declarado que cuando estaban en la relación abusiva, nunca sonreían y que el abuso había sido la peor experiencia que habían vivido. Reconocemos la devastación, el aislamiento y el trauma del abuso doméstico, además de la fuerza y resiliencia de las víctimas.

Las víctimas y los sobrevivientes pueden tener cualquier edad. El año pasado, hubo varios casos de violencia doméstica con consecuencias fatales en Rhode Island que involucraron a víctimas mayores de cincuenta años.

Aunque el riesgo de violencia de pareja (IPV) es mayor entre las mujeres de 18 a 24 años, sabemos que el abuso afecta a las personas a lo largo de su vida, incluyendo niños, adolescentes y adultos mayores.

Aislamiento

Algunas víctimas de violencia doméstica son aisladas por el abusador, quienes les impiden ver a sus amigos o familiares. Algunas víctimas se les impide ir al trabajo o a la escuela y no pueden participar en pasatiempos o actividades. Los abusadores suelen utilizar esta táctica de aislamiento para controlar aún más a la víctima y evitar que cuente a otros lo que le está sucediendo o que busque ayuda.

Este DVAM, nuestro anuncio de servicio público (PSA) por radio, cuenta sobre tres amigas que han sido inseparables desde la escuela secundaria. Dos de las amigas extrañan a su otra amiga, que no ha respondido a los mensajes de texto. Se dan cuenta de que algo no parece estar bien y de que necesitan ver cómo ella está. Todos podemos ayudar a prevenir la violencia doméstica conociendo sus señales de advertencia, incluyendo el aislamiento de una amiga o ser querida en su relación. Si sospecha o sabe que alguien está sufriendo abusos, hágale saber que usted es una persona segura en la que puede confiar. Esté atento y mantenga el contacto. Llame a la línea de ayuda confidencial las 24 horas, los 7 días de la semana (800-494-8100) para obtener recursos. Vaya a la página 20 de nuestro manual informativo Paz en el Hogar para conocer las formas en que puede ayudar (inglés/español).

Abuso financiero

Según la Fundación Allstate, el abuso financiero ocurre en casi el 99 % de las relaciones abusivas. Las encuestas entre sobrevivientes muestran que sus preocupaciones sobre su capacidad para mantenerse económicamente a sí mismos y a sus hijos fueron una de las principales razones para permanecer o regresar a una relación abusiva.

Cuando hay abuso financiero, la pareja abusiva puede restringir el acceso de la víctima a los fondos, impedirle trabajar o monitorear y controlar cada dólar que gasta. Sabemos que es posible que algunas personas que sufren abuso no puedan salir a tomarse un café con sus amigos porque el abusador está controlando su dinero o puede estar monitoreándolas o aislándolas.

Estamos conscientes de que los impactos del abuso financiero crean barreras para que una víctima abandone la relación y obtenga su estabilidad financiera. Si a la víctima no se le permitió trabajar mientras estaba en la relación, es posible que tenga problemas para encontrar un nuevo trabajo debido a lagunas en su historial laboral. Es posible que no cuente con ahorros porque el abusador controlaba su dinero. Es posible que el abusador haya saboteado su crédito al crear deudas a nombre de la víctima. La violencia doméstica también es una de las principales causas de que mujeres y niños estén sin hogar. Sobrevivientes a menudo luchan por acceder a viviendas seguras y asequibles y se sienten forzadas a elegir entre permanecer en la relación abusiva o quedarse sin hogar.

Visite nuestra página NECESITO AYUDA para obtener información sobre recursos comunitarios locales.

Usamos los términos «víctima» y «sobreviviente» para crear conciencia sobre nuestro trabajo e incluir las diferentes experiencias y perspectivas de quienes han sufrido abuso.

Algunas personas se identifican con un término u otro, otras usan ambos y otras no usan ninguno de los dos.

Honramos a las víctimas cuyas vidas fueron arrebatadas por la violencia doméstica.

Para obtener más información, consulte el informe de la RICADV, Domestic Violence Homicides in Rhode Island: 2016-2020 Report..

¡Sí! Es posible ponerle fin a la violencia doméstica para las generaciones futuras. En la RICADV, parte de nuestro trabajo se enfoca en prevenir la violencia doméstica antes de que tenga la oportunidad de comenzar. Podemos lograrlo trabajando para crear comunidades seguras, conectadas, saludables y equitativas. Con este objetivo en mente, podemos abordar las condiciones comunitarias que aumentan el riesgo de violencia, como la pobreza, el aislamiento social y las normas de género nocivas.

Como estado, también debemos fortalecer las formas en que Rhode Island apoya y protege a las víctimas de abuso y a sus hijos. Al tomar en serio la violencia doméstica y asegurarnos de que las víctimas tengan los recursos y servicios que necesitan y merecen, enviamos el mensaje de que les creemos a los sobrevivientes y de que no toleramos la violencia. Esto puede ayudar a crear el cambio cultural necesario para ponerle fin al abuso.

¿Qué podemos hacer como miembros de la comunidad?

A continuación se encuentran recursos para personas que sufren abuso y aquellos que quieren ayudar.

Servicios locales para víctimas y supervivientes de violencia doméstica

*Cada una de nuestras agencias miembro cubre una región del estado. Sus áreas se enumeran arriba; sin embargo, cualquier persona en RI puede obtener servicios en cualquier agencia.

Central Falls, Cumberland, Lincoln, Pawtucket, Providence, Woonsocket, Burrillville, Glocester, North Smithfield, and Smithfield

Charlestown, Exeter, Hopkinton, Narragansett, New Shoreham, North Kingstown, Richmond, South Kingstown, and Westerly

Coventry, Cranston, East Greenwich, Foster, Johnston, North Providence, Scituate, Warwick, West Greenwich, and West Warwick

Barrington, Bristol, East Providence, Jamestown, Little Compton, Middletown, Newport, Portsmouth, Tiverton, and Warren

Las agencias miembros afiliadas son organizaciones cuyo trabajo incluye algunos programas para abordar o prevenir la violencia doméstica.

Descargue el Calendario de Eventos DVAM 2023

Haga clic en la imagen a continuación para descargar nuestro Calendario de eventos DVAM 2023, que incluye enlaces de registro para muchos de los eventos organizados por RICADV y nuestras agencias miembros.

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¡Estamos muy agradecidos de contar con el apoyo de nuestros generosos patrocinadores de DVAM 2023!

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